La soledad de los dientes de león
Mi baúl de cuentos
Karyme Celeste Medina Patiño   -   2023-12-02
 Compartir en facebook 
Érase una vez un diminuto diente de león que apenas florecía en una curiosa maceta encima de un balcón en una casa habitada.




Este se encontraba justo floreciendo cerca de la presencia del viento y la calidez del sol. No podía sentirse más feliz, ya que estaba conformado por una gran cantidad de pequeños y delgados pétalos con semilla, amarillos y brillantes, los cuales siempre permanecían unidos sin excepciones.





Así, cada pétalo creció rodeado de otros más siendo felices, siempre acompañados, o así era hasta el momento en que después de unos días la flor se cerró, dejando las semillas en la parte superior, esperando la fuerza del viento para ser sopladas una a una y seguir su camino por separado.





Contados los días y al cabo de unas horas llegó una gran ráfaga de viento, que causó que cada semilla se desprendiera de la punta del tallo en la que se encontraban. Una a una fueron volando y se separaron; en sus diferentes caminos experimentaron diferentes situaciones, volaron con dificultad, cayeron, se separaron y con ayuda del viento siguieron volando encontrando cada una de ellas su propio camino, inevitablemente lejos de los demás.





Porque si algo no podían evitar... era la tristeza que les causaba separarse y vivir solas su propia tormenta y su propio temor, experiencias de todo tipo en su camino, sin embargo, acompañadas de la soledad. Y aunque en un futuro se llegarían a reencontrar, de la misma forma experimentaron solas sus peores y mejores momentos, encontrando ahí…el ambiente de esa soledad en su máxima expresión al nunca haber experimentado antes esa gran separación ...





Nosotros ...a lo largo de nuestra vida y camino experimentamos situaciones similares, llegando a presenciar notablemente o no a ese ser siempre presente en la vida de todos, la soledad.

A veces vivimos buenos momentos con ella aprendiendo a prestar más tiempo a nosotros mismos, otras veces tenemos que enfrentar nuestras mayores tormentas acompañados de esta, en otras ocasiones nos ayuda a entender que el amor más importante que recibimos debería ser principalmente el expedido por nosotros mismos y no en su mayoría el de los cumplidos de los demás, en otras situaciones más nos muestra a un ser independiente en cada uno de nosotros.





Realmente la soledad no se puede definir como algo bueno o malo; si algo entendemos al respecto o tenemos presente, es el hecho de que: “la soledad no es definitiva, tampoco buena ni mala, nos forma a base de experiencias y siempre nos deja algo que aprender”.
COMENTARIOS:
ÚLTIMAS NOTICIAS
NUESTRAS ALIANZAS
pruebaaaa