Ingresar al mundo de las drogas en estos tiempos es bastante fácil, además por mucho placentero, y conlleva a quienes las utilizan a una catarsis completa entre la aceptación y la evasión de la realidad.

Debemos ser conscientes de que, identificar cómo es que el colocar una pastilla o cualquier tipo de droga en cualquiera de sus formas, es tan satisfactorio para una persona adicta, como lo es un logro para alguien que no consume, pero qué es lo que hace que entremos a este mundo a jugar principalmente con la irreverencia de poder controlar algo que claramente en años y años de evolución, independientemente de la lucha constante, no de una sino de un grupo de personas preocupadas por la humanidad y su propio futuro, no se ha podido controlar.





Quizá la mera curiosidad, el hecho de querer perder en ese momento la conciencia de lo que estas viviendo, o simplemente para encajar en un mundo en el que claramente para encajar te han puesto tantos estereotipos sociales, tantas etiquetas que sencillamente es imposible que alguien encaje a la perfección, pero sin los cimientos de educación y amor correctos, claro que las drogas son el paraíso perfecto para una realidad perdida.





Y es que, justamente cuando estos cimientos fallan, y cuando te vez, sólo entre el mundo llegan ellas como un respiro a tu realidad, como una versión más ligera de ti y como algo que devuelve a tu vida la atención perdida de quienes debía ser tus guías, muchas veces nos preguntamos, ¿Por qué alguien que tenía todo para ser un líder nato se perdió en el camino? Realmente no deberíamos dejar de cuestionarlo por qué justamente nosotros y nuestra falta de empata, orilla a otros a caer entre los enredos de una realidad más sencilla de una realidad en la que con una simple pastilla, puedes sentirte en las nubes y más poderoso de lo que en realidad eres, pero te has cuestionado si… ¿Esto es la realidad que te brinda el uso de narcóticos? Si bien te causa tanta euforia e inhibe muchas partes de quién eres para las personas ajenas a este mundo, les destroza el alma ver como su hijo, mamá, esposo, papá, etc., se destruye poco a poco hasta consumir los esfuerzos de cada uno por salvarte, llevándote a perder todo y a todos los que se preocupaban por ti, y es que, realmente es un verdadero alivio consumir porque, al final, las personas que muchas veces lucharon por ti abandonan la lucha, terminan culpando una y otra vez por lo que hicieron mal, a veces ni siquiera alcanzan a verte tocar fondo porque antes de eso a causa de todo el esfuerzo por recuperarte se pierden en el intento y si el consumir drogas es tan gratificante que realmente al quedarte sólo, envuelto en esa creación de irrealidad, no llegas ni a darte cuenta de la pérdida de todo lo que tenías no solo de forma material, sino incluso de la pérdida de un hijo, hermano, padre o madre y es que, para todos siempre será más sencillo tratar de evadir y no afrontar lo que nos daña antes que luchar contra ello.

Pero sin duda puedes vivir en el edén, claro solo en caso de que estés dispuesto a pagar el precio.