¿La forma en que nos divertimos repercute en la paz de la sociedad? Sabemos que la diversión es de gran importancia para el desarrollo y crecimiento individual de cada persona, pero actualmente en la sociedad en la que vivimos no sabemos reconocer en sí lo que nos causa diversión, pues muchas veces confundimos el disfrutar, la satisfacción con la sana diversión, lo que causa que no encontremos ni siquiera una paz personal.

La diversión es, según Wikipedia, la “acción de divertir, divertirse, recrearse o entretenerse. Pasar el tiempo de forma muy agradable”, y a quien no le gusta esto, pues el divertirnos nos causa un gran beneficio, estimula nuestro cerebro, nuestro cuerpo, nuestra mente y nos ayuda a formar lazos sociales y a fortalecer la sociedad. Pero para obtener estos beneficios debemos saber reconocer las actividades de ocio o diversión adecuadas, ya que hay varias actividades que pensamos que nos generan diversión pero no es así, sino que solo las disfrutamos, solo nos dan felicidad por un momento son más pasajeras y algunas veces no nos causan beneficios sino que llegan a perjudicar nuestro bienestar físico y psicológico.





Muchas personas creen que la diversión la encuentran tomando, drogándose, teniendo relaciones sexuales, jugando videojuegos por largas horas o estando pegados a las redes sociales mucho tiempo; pero están equivocadas, pues estas actividades solo les generan disfrute o satisfacción por solo un momento pero no los nutren, no les generan un desarrollo. Por lo que debemos elegir aquellas actividades que generen una sana diversión, que nos permitan sustituir nuestras labores cotidianas por una diversión responsable, donde no se deje de lado la convivencia familiar, la responsabilidad en el estudio y el rendimiento en el trabajo, aquellas actividades que favorezcan la convivencia, el descanso y nos ayuden a recobrar ánimos.





Algunos ejemplos de actividades de sana diversión que nos ayudan a cultivar los valores, la paz tanto personal como social son actividades al aire libre que nos ayuden a tener contacto con la naturaleza, los deportes, juegos de mesa, eventos sociales y culturales o la afición hacia alguna bella arte. Cuando una persona logra disfrutar estas actividades y reconocer que le generan diversión, esta ha logrado comprender y asimilar el valor de la sana diversión lo cual aportará a la paz personal y a la vez a la paz social, debido a que durante las actividades de diversión se convive con diferentes personas ayudará a que aprendamos a socializar de una manera más pacífica, aceptando y siendo paciente con los defectos de los demás, lo cual contribuirá a tener un mejor clima de paz.

Después de lo anterior podemos concluir que nuestra forma de diversión sí afecta o beneficia en el clima de la paz de la sociedad y para lograr tener una buena sociedad es mejor optar por sanas actividades de diversión.